En el apartado número 13 de “geografía y montañas”, publiqué
un esquema teórico con su correspondiente explicación con el objeto de que
podamos entender el concepto del árbol de prominencias. Mediante un árbol podemos
ordenar y expresar gráficamente tanto las montañas más importantes que
conforman una cadena montañosa, como otras cimas secundarias de menor
relevancia. También utilizando un árbol podemos comprobar los dominios de las
montañas más prominentes, así como su relevancia, conceptos que explayaré en
apartados futuros.
Ahora veamos un ejemplo práctico real de un árbol de
prominencia. Para ello he escogido un sector de los Pirineos, el occidental, y
para simplificar el ejemplo y pueda verse con más claridad, en esta ocasión tan
sólo utilizaré un rango de prominencia, sólo vértices, es decir, montañas que
superen los 500 metros de prominencia.
La montaña más elevada de este sector, o montaña madre, es
el Midi d’Ossau, por lo tanto, es desde esta cumbre de donde partirá y se
desarrollará todo el árbol, que quedaría tal que así:
PIRINEO OCCIDENTAL, prominencia +500 m.
Como vemos desde el Midi parten tres brazos principales,
hacia la Collarada , hacia el Bisaurín y hacia el pico de Sesques. Estas tres cimas dependen directamente del
Midi, por lo que el cálculo de sus prominencias se realizan a partir del
collado más elevado que las une directamente con el Midi.
De la misma forma, cada una de las cimas están conectadas
con otras cimas, y estas a su vez con sucesivas, con lo que el árbol
va ampliándose, hasta llegar a las últimas cumbres, las que cierran el árbol.
En este árbol como he dicho por motivos de simplicidad y claridad tan sólo
aparecen cimas de +500 metros de prominencia, si introdujéramos cimas de menor
prominencia el árbol sería mucho más amplio y explicativo, pero también más complejo.
En la siguiente imagen, tomada del Google Earth, podemos ver
de forma esquemática en una foto por satélite real, la distribución de los vértices que
conforman el árbol, así como las líneas que expresan las relaciones de
dependencia entre ellas. La cima con un ícono de color amarillo y una estrella
es la montaña madre, en este caso el Midi, donde se inicia el árbol.
Al observar esta última imagen del Google Earth también
podemos comprobar como la densidad de vértices no es uniforme en el espacio,
así por ejemplo el lado más oriental de la imagen, la que rodea al Midi y se
aproxima hacia el centro de la cordillera, posee una mayor concentración de
cumbres que si nos desplazamos hacia el Cantábrico. Por ello el número de
vértices que podemos localizar en una región es un buen indicativo de cuanto de
abrupto es un territorio. Cuanto mayor sea el número de estos y mayor sea la
proximidad entre ellos, más agreste será la cordillera que estemos estudiando.
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