27. Cordilleras y vértices, comparaciones gráficas.

Una manera sencilla de hacernos una idea rápida de cuanto de abrupta es una cadena montañosa es contabilizar sus vértices, es decir, esas montañas geográficamente más relevantes que superan los 500 metros de prominencia y que sirven de punto de referencia para multitud de cumbres dependientes de ellas.

Cuanto más vértices contenga una cordillera más abrupta será esta, al poseer un mayor número de montañas principales bien individualizadas, que a su vez contendrán una cantidad superior de cimas secundarias y accesorias dependientes de estas.

La proporción de prominencias se mantiene de forma regular como hemos visto en la pirámide de prominencias, siendo mayor el número de cimas y cotas cuanto menor es su prominencia. Podemos hacernos una idea rápida de cuanto de abrupta es una cordillera contabilizando únicamente sus vértices, sin necesidad de contabilizar sus innumerables cimas secundarias y accesorias.

Veamos un par de ejemplos utilizando unos sencillos gráficos, en el primero de ellos podemos ver los sistemas montañosos más importantes de la península ibérica con montañas por encima de los 2000 metros de altitud.

Donde utilizando dos variables, la altitud con cimas de +3000 y +2000 metros, y la prominencia de +500 metros, hallamos el número exacto de vértices en las siguientes cadenas montañosas de la Península.

	3000	2000	Total
PIRINEOS	14	47	61
BÉTICAS	1	11	12
CANTÁBRICA	-	23	23
SISTEMA CENTRAL	-	9	9
SISTEMA IBÉRICO	-	6	6
PENÍNSULA IBÉRICA	15	96	111

Así encontramos tan sólo 15 vértices por encima de los 3000 metros de altitud, estando su gran mayoría, 14, concentrados en los Pirineos. Observando los totales podemos comprobar como más del 50% de los vértices pertenecen a los Pirineos, lo que nos da una idea fiel del carácter abrupto de esta cordillera sobre los demás sistemas montañosos de la península. Es importante tener en cuenta que si en este estudio además de los vértices introdujéramos cimas de menor rango de prominencia, las diferencias serían sensiblemente aún mayores.

Tras los Pirineos, es la cordillera Cantábrica, pese a no contar con cumbres de 3000 metros, la más abrupta de España tras los Pirineos, pues en su total contiene la segunda mayor cifra de vértices por encima de los 2000 metros de altitud.

Veamos ahora un segundo gráfico, que coteja los Pirineos con la gran cordillera de Europa, los Alpes, para poder hacernos una idea de esta última.

	4000	3000	2000	Total
ALPES	22	193	314	529
PIRINEOS	-	14	47	61

Como se puede ver las diferencias son dilatadas entre una y otra cadena montañosa, esto da una idea de la extrema verticalidad de los Alpes, siendo no obstante, muy escasos los lugares en el mundo donde podamos encontrar concentraciones de montañas semejantes a la gran cordillera alpina de Europa.